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Spleen

Me dicen que le han visto irse sin volver la vista atrás. Su melena rubia ondeaba bajo la brisa que , convertida en viento del norte, pronto agitará las hojas con fría violencia. Creo, por lo que me cuentan, que lucía una sonrisa algo triste como suele ocurrirle todos los años por estas fechas cuando se despide de nosotros. Me consta que se aleja un tanto melancólico y que tras sus ojos azules traza ya sus planes, sus travesuras y propósitos para el año que viene. Y mientras camina, a pesar de que lo hace envuelto en la pena que siempre acompaña al final de todas las cosas, sonríe para sí al pensar en las cálidas ceremonias de la vida con las que nos obsequiará de nuevo mucho antes de lo que pensamos. Es un buen tipo, sin duda. Yo le prefiero entre todos sus hermanos porque nunca me decepciona: llega sin avisar y acostumbra regalarme momentos inolvidables, cenas en buena compañía, multitud de divertidas anécdotas, noches mágicas y silenciosas de esas que nunca se olvidan. Me empuja con su soleada alegría a celebrar que estoy vivo, que soy un hombre afortunado por infinidad de motivos y me invita a dar las gracias por todo ello, cosa que hago a diario, no sin cierta emoción, bajo su limpia luz. Aunque su visita es inexorable, jamas resulta igual a sí mismo, nunca se repite lo que ocurre al amparo de sus amables días. Así que no tiene nada de particular que me apene su marcha, porque parte con él algo muy mío que ya nunca volverá. Como ves, aún no has acabado de alejarte y ya estoy deseando tu vuelta. En fin, te echaré de menos, amigo. Gracias por todo una vez más.

#narrativarecomendada😎😎#marianogómezgarcía#Zulú#CanciónDeCrimea#ProsaCanalla

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Publicado enGeneralVerano 2022

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